Un atunero vasco destinado al desguace que hoy salva vidas.

En 2017, dada la situación en el Mediterráneo Central, decidimos poner en marcha el proyecto de rescate marítimo AITA MARI. El ingente trabajo de las personas voluntarias, asociaciones y la financiación de instituciones y particulares, nos permitió transformar el pesquero en un barco de rescate para salvar a las personas refugiadas que se ahogan en el mar Mediterráneo.

Este documental narra la odisea de más de dos años de duración de la nave desde su reconstrucción hasta la culminación del primer rescate. Aita Mari es la historia del esfuerzo colectivo de un conjunto de ciudadanos y ciudadanas anónimas para socorrer a personas que huyen de los conflictos, la violencia y el hambre, entre otras.

¿Por qué tiene el nombre Aita Mari?

Jose María Zubia, nacido en Zumaia en el seno de una humilde familia de pescadores, desde pequeño se dedicó a la pesca hasta llegar a ser patrón de bajura en el Puerto donostiarra.

En el desempeño de su trabajo como patrón, comenzó a popularizarse en San Sebastián y en toda la costa vasca por la ayuda que prestaba a otros compañeros en situaciones difíciles durante las tormentas que sorprendían en el mar a los pescadores. Para la posteridad quedó el rescate que comandó el 22 de Julio de 1861, cuando una tremenda tormenta con galerna logró rescatar a 3 tripulantes en peligro. Por este acto, él y sus compañeros recibieron la Gran Cruz de la Beneficencia de la Marina.

Pero el 9 de enero de 1866 se desató otra devastadora tormenta y Zubía partió del puerto de San Sebastián en su barco a rescatar a unos pescadores de Getaria que trataban de entrar a la bahía de la Concha. Cuando había logrado poner a salvo en su bote a todos los náufragos, un golpe de mar lo arrastró y desapareció en el mar para siempre. Numeroso público presenciaba el rescate desde la costa. Ese día fallecieron 38 pescadores por la tormenta. Este suceso provocó una gran conmoción en San Sebastián y en toda la costa guipuzcoana. Los donostiarras erigieron un busto en el muelle del puerto pesquero en honor a ‘Aita Mari’ para perpetuar su memoria.

Nuestro buque de rescate ‘Aita ‘Mari lleva también su nombre en honor a él por su voluntad solidaria que reniega a que la gente en peligro quede sepultada bajo el mar ante la grave crisis migratoria del Mediterráneo Central.

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CHALECO SALVAVIDAS

Tenerlo puede marcar la diferencia entre la vida o la muerte

EQUIPOS DE SEGURIDAD

Indispensables cuando puede encontrarse gente en el agua.

ASISTENCIA SANITARIA

Medicinas para las personas vulnerables que las necesitan.

MANTENIMIENTO Y REPARACIONES

El mantenimiento del barco es vital para garantizar la seguridad a bordo.